Me parece muy graciosa una realidad que muchos pacientes me han comentado en las consultas: una relación no termina de ser oficial hasta que no aparece en Facebook. ¿Qué tan cierto es eso? ¡Depende de cada quién! Muchas personas han optado por no hacer pública su vida en pareja y otras necesitan gritarlo en todas y cada una de las redes sociales. Es algo muy personal y que debe ser conversado por los integrantes de la relación en algún momento. Independientemente de la decisión que tomen, mi consejo como sexóloga es que dejen las reglas bien claras antes de que cualquier tontería termine por convertirse en una fuerte pelea marital.  

Sin embargo, otros expertos son más categóricos y afirman que las parejas felices y plenas no están publicando constantemente en sus redes sociales. Es más, se atreven a decir que los que lo hacen es porque se sienten inseguros y necesitan aprobación de terceros. Como dije anteriormente, puede ser delicado generalizar porque conozco muchas personas que no les interesa compartir absolutamente nada en la web y otras que lo han convertido en su estilo de vida.

Lo que sí me parece terrible son aquellos que postean en sus estados una serie de directas e indirectas, cuentan a todo pulmón sus problemas maritales y necesitan hacer público lo mal que se sienten. ¡No hagas eso nunca! Si no recibes lo que necesitas de tu pareja y no te sientes cómodo, lo mejor es conversar en privado y aclarar los asuntos. ¡No te conviertas en la burla del Facebook, por favor! 

También está el caso contrario, esas parejas que no paran de publicar en sus perfiles lo mucho que se aman. ¡No busques la aceptación de terceros! ¿A quién tienes que demostrarle tu plenitud con esas publicaciones? 

Como experta mi consejo es que busques el equilibrio y manejes estos espacios digitales con mucha cautela. Recuerda que a nadie le interesa lo feliz o desgraciado que eres.